Pensadores de Mauror


Un antiguo alumno, Francisco Javier López Medina,  me ha enviado el siguiente documento, en el que se hace referencia a dos pensadores del Mawror de la época: Muhammad al-Mawrurí y Abu Muhammad Abdanah al-Mawrurí.

Gracias, Javier, por tan interesante aportación.




      El pensamiento de al-Ándalus bebe de múltiples corrientes de pensamiento islámico-oriental como son: el derecho islámico sirio; la mu’tazila, una corriente teológico especulativa, racionalizadora y voluntarista, que defiende la unicidad y la pura esencialidad de Dios, el libre albedrío y la necesidad de un poder establecido con el respaldo popular; las doctrinas batiníes, una corriente esotérica que mantienen una interpretación alegórica del Corán; la ciencia matemático-astronómica y la médico-biológica; la mística sufí o tasawwuf, que inicialmente se caracteriza por un ascetismo práctico-personal y que evoluciona hacia formaciones cenobíticas; y, la fálsafa o filosofía árabe, fuertemente influida por el pensamiento neoplatónico y aristotélico. Todas estas líneas de pensamiento llegan a al-Ándalus y se anudan entre sí dando lugar a un polo de fecundísimo  en el que destacan nombres como: Avempace, Ibn Tufayl, Maimónides o Averroes.



Mawror no queda apartado en este panorama. Más concretamente, nos han llegado testimonios de al menos dos antiguos pensadores moronenses: Muhammad al-Mawrurí y Abu Muhammad Abdanah al-Mawrurí. Sin embargo, no podemos considerar estrictamente a estas dos figuras  como filósofos, pues sus nombres se hallan vinculados más bien al desarrollo de la mística que va desde Ibn Masarra a Ibn ‘Arabí, pasando por Ibn al-‘Arif.

De Muhammad al-Mawrurí solo tenemos vagas referencias que lo sitúan como uno de los principales miembros de la primera generación de discípulos de Muhammad b. Masarra, un importante pensador y asceta que vivió entre los siglos IX y X. No sabes lo que pensaba nuestro personaje, pero si sabemos lo que enseñaba su maestro, y eso nos permite reconstruir los caminos por donde iría el pensamiento de “el de Morón”, que es lo que significa “al-Mawrurí”. Ibn Masarra seguía las doctrinas mu’tazilíes del libre albedrío y la negación de la realidad física de los castigos del infierno, así como otras doctrinas sufíes y bataníes entremezcladas con numerosos elementos neoplatónicos. Entre sus principales tesis destacan: la concordancia entre el conocimiento especulativo y la revelación, a pesar de sus diferentes lenguajes; la concepción de la creación como producto de emanaciones sucesivas desde el Trono de Dios, que es la inteligencia universal, una inteligencia radicalmente separa del mismo Dios, el cual es singular, pura esencia y unicidad, eterno movimiento y actividad, además de omnisciente; la idea de una ascesis, de raigambre neoplatónica, como camino catártico a la sabiduría moral, a la auténtica felicidad eterna, caracterizada por la introducción del libre albedrío y la importancia de la intención.
No sabemos lo que le sucedería a Muhammad al-Mawrurí, pero lo cierto es que en el S. XII nos encontramos con nuestro segundo protagonista: 

el místico Abu Muhammad Abdanah al-Mawrurí. El pensamiento masarrí se extendió por el antiguo al-Ándalus hasta influir a Ibn al –‘Arif, quien también mantuvo ideas del neoplatonismo místico como: la unión estática con Dios y la identifica de Dios con el ser y de la creación con el no ser. Éste Ibn al-‘Arif influyó de forma importante en Abu Madyan y Abu Muhammad Abdanah al-Mawrurí, quienes a su vez influyeron en Ibn ‘Arabí. Y es precisamente por Ibn ‘Arabí por quien conocemos numerosos elementos de la vida y enseñanzas de Abu Muhammad Abdanah al-Mawrurí. Ibn ‘Arabi, en su formación, frecuentó a muchos de los principales místicos y pensadores del al-Ándalus de su época, algunos de los cuales vivían en Morón, Marchena o Carmona. De al-Mawrurí cuenta muchos hechos milagrosos y experiencias místicas, pero también revela influencias neoplatónicas y un importante conocimiento de obras aristotélicas y pseudoaristotélicas en disputa con Averroes. Ello es deducible de un testimonio el que afirma que: “cuando visité al maestro de espíritu, al santo Abu Muhammad al-Mawrurí,  en la ciudad de Morón, encontré en su casa el libro Secretum secretorum que el Filósofo compuso para Dulkarnayn [el Alejandro Magno mítico…] Abu Muhammad me dijo: «Este autor trata del gobierno político de este imperio mundano y yo desearía que tú intentases aventajarle, estudiando el gobierno del imperio en el cual consiste nuestra felicidad»”.



Para ampliar información:
-          CRUZ HERNÁNDEZ, Miguel. (2000).Historia del pensamiento en el mundo islámico 2. El pensamiento de al-Ándalus (siglos IX-XIV). Madrid: Alianza. (La mayoría de los datos han sido extraídos de esta obra).
-          ASIN PALACIOS, Miguel (2005). Vida de santones andaluces: Epístola de la santidad de Ibn Arabí de Murcia. Valladolid: Maxtor.
-          IBN ARABI (2007). Los sufíes de Andalucía. Málaga: Sirio. 



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